El cultivo de tabaco comenzó en nuestro país durante el período colonial. Su crecimiento a nivel industrial estuvo acompañado de la llegada de inmigrantes europeos y contribuyó con el crecimiento económico de diversas regiones.
José Daumas fue uno de esos inmigrantes. Nació en la ciudad de Marsella, en 1841. Varios años después, precisamente en 1869, arribó a Buenos Aires donde ejerció su primer trabajo en la ciudad como tenedor de libros (forma en que se llamaba a quienes llevaban los libros de contaduría de un comercio).
Este conocimiento le valió pues al poco tiempo abrió su pequeño local donde comenzó a fabricar cigarros y cigarrillos.
Desde el año 1870 puedo establecer su humilde fábrica y ya en 1880 tenía un taller para la fabricación con 14 modernas maquinarias francesas que eran operadas en su mayoría por mujeres. Pero su trabajo no fue siempre cuesta arriba.
Algunos autores comentan que en el año 1875, el Sr. Daumas se vio envuelto en un pleito que le costó cinco años de rendimiento económico.
Pionero del tabaco y presidente del Club Industrial
Según el libro, “Pioneros del tabaco”, escrito por Alejandro Butera, sus cigarrillos EMINENTES, TIP-TOP y GLORIA no empleaban goma ni
eran tocados con la mano gracias a una invención suya.
Daumas también fue un iniciador de la agremiación industrial y difusor de las exposiciones industriales: fue presidente del Club Industrial, fundado en 1875 y también fue redactor de su órgano de difusión El Industrial.
El mejor cigarrillo francés de hebra
Entre 1870 y 1875, José Daumas ingenió el llamado cigarrillo francés de hebra, anterior a la propia fabricación en Francia.
En 1878, En la Exposición Universal de París obtuvo el primer premio por sus cigarrillos, mientras que un año después, obtuvo un premio por parte de la provincia de Buenos Aires y una medalla de oro del Gobierno Nacional por su elaboración de tabaco.
Cigarrillo Tip-Top: el elegido por la aristocracia argentina
Los cigarrillos TIP-TOP, de verdadero tabaco Habano, fueron uno de los más reconocidos de la industria nacional.
La expresión «tip-top» viene del lenguaje corriente inglés y se aplica a lo que es excelente o de la más alta calidad. Su delicado trabajo, la calidad y exotismo de sus materias primas hicieron que su producto se posicionara en las clases aristocráticas.
Comenzado el siglo XX, estos cigarrillos venían en paquetes redondos de 18 unidades que se vendían a 15 centavos el atado.
José Daumas vuelve a Francia
Para 1887, Daumas había regresado a Francia. Fue elegido consejero general y cumplió funciones hasta 1890.
A comienzos de esa década, instaló una casa de compras en París en donde adquiría tabacos turcos, exóticos, etc., que eran necesarios para la fabricación de sus productos en Buenos Aires.
Desde 1892 sus negocios en nuestro país quedaron en manos de su compatriota Augusto Pech, quien apareció como su sucesor en las publicidades de los productos.