Fracturas en Vaca Muerta cayeron 12% durante diciembre
De esta manera, el año cerró con un promedio de 269 fracturas mensuales, una caída de casi el 50% respecto a las 534 de 2019.
La actividad en la formación de Vaca Muerta sumó en diciembre 477 etapas de fractura, con una caída de 12% respecto al mes previo, mientras que el año cerró con un retroceso promedio de 50% respecto a 2019 producto del fuerte impacto de la pandemia de coronavirus en la demanda y la actividad de los campos.
De esta manera, el último mes interrumpió un sendero de recuperación de actividad que había alcanzado en noviembre una mejora intermensual respecto a las 345 etapas de fractura de octubre en poco más del 57%, con lo que sumó en esa oportunidad el cuarto mes consecutivo de incremento de actividad.
Finalmente, en los reservorios convencionales de la cuenca neuquina se registraron los desempeños de Vista Oil & Gas con 12 etapas, OCR con 6, Tecpetrol con 2 e YPF con 1.
La caída de actividad por la pandemia se registra desde que en marzo las petroleras y sus compañías de servicios concretaron 440 etapas de fractura hasta el día 20 de inicio del aislamiento, lo que ya a esa altura del mes indicaba una tendencia en crecimiento respecto a las 401 de febrero.
En 2019, Vaca Muerta cerró en su nivel histórico más alto, con 6.425 etapas de fracturas y 33% más de producción en las áreas en concesión respecto de 2018.
La técnica de fractura, o fracking en inglés, es la forma en que se estimulan los pozos de recursos no convencionales como el de Vaca Muerta.
Este sistema de punzado en la roca consiste en perforaciones mediante la inyección a presión de un fluido formado básicamente por agua y arena (99,5%), más el agregado de algunos aditivos químicos.