Tregar, la historia de Cipriano García y Hortensia de Simón
La historia de Tregar, la empresa familiar que desde un pueblo de 5.000 habitantes exporta a todo el mundo.
Tregar pasó de ser un tambo pequeño a una de las compañías lácteas más importantes del país, aliada de los argentinos para comprar los productos alimenticios básicos que tanto cuesta adquirir en contextos de crisis y elevada inflación.
Cipriano García y Hortensia de Simón, el matrimonio que fundó Tregar
La historia de Cipriano García y Hortensia de Simón comienza en Europa, como tantos otros matrimonios que emigraron al país en las primeras décadas del siglo pasado. Llegaron desde un pequeño pueblito llamado Villavelayo, en La Rioja española, y se instalaron en La Rinconada, Santa Fe, en el corazón de la cuenca lechera nacional.
Del primer tambo a la industrialización
Gracias a los conocimientos en la industria láctea que los habían acompañado desde su tierra, en los años 40 fundaron un tambo, que luego creció y se dedicó a la producción de quesos artesanales. En los primeros años usaban una olla de 75 litros, y don Cipriano salía a venderlos por pueblos y parajes cercanos, en una valija que poseía de antes de llegar a la Argentina.
Cipriano y Hortensia tuvieron 6 hijos, y 3 de ellos siguieron el negocio. En el año 1972 decidieron que la empresa familiar debía dar un salto, hacia una nueva etapa industrial que le permitiera crecer, allí fue que nace García Hermanos, la empresa láctea que bajo el nombre de Tregar comercializa más de 100 productos, incluido el arroz con leche envasado característico de la firma.
¿Por qué se llama Tregar?
La marca Tregar se llama así por la unión de «tre» (tres) y «gar» (García), «tres garcías»: Florencio, Vicente y Pedro, los tres hijos que continuaron la empresa familiar. Ellos serían los encargados de construir una nueva fábrica, en Calchaquí, y ampliar el tambo original en La Rinconada. Las producción en ambas plantas permitió el desarrollo de nuevos productos, como la crema de leche, los quesos untables y el dulce de leche. También, hizo posible la expansión hacia nuevas regiones, abarcando el norte de Santa Fe, el interior de Buenos Aires y algunas zonas de Córdoba.
García Hermanos se Instala en Gobernador Crespo
Los tres hermanos poseían una mentalidad cautelosa, que les permitía ir expandiéndose, pero de manera paulatina. Siempre que lo hicieron fue mediante las utilidades de la empresa, confiando en el boca a boca para atraer a los consumidores. El plan resultó una y otra vez a medida que se ganaban nuevos mercados, pero nunca se cuestionó la idea de seguir a paso lento, pero seguro.
Con esta lógica empresarial, se construyeron los cimientos para llegar al mercado más amplio, pero en el que la competencia era mayor: la ciudad de Buenos Aires. En 1998, García Hermanos se asentó en Gobernador Crespo, hito fundamental para la mencionada expansión y la posterior conquista de los mercados internacionales. La localidad apenas cuenta con algo más de 5.000 habitantes, sin embargo allí se ubica la planta de más de 2.000 metros cuadrados.
Tregar llega al mercado de Buenos Aires
Finalmente, a comienzos de los 2000 llegó el salto definitivo. La misma estrategia que los había hecho llegar a miles de mesas en todo el interior argentino, fue la utilizada para conquistar los supermercados porteños: poca variedad de productos, de buena calidad, y confianza en la recomendación de los usuarios.
Los productos elegidos fueron los quesos semiduros -gruyère, holanda y fontina- y el arroz con leche, un postre que ningún otro competidor ofrecía. El resulto está a la vista en todas las góndolas del país.
Actualidad de la empresa
Actualmente, la compañía sigue en manos de la familia Garcia, procesa 300 millones de litros de leche al año, que se destinan a la elaboración de quesos, lácteos y otros subproductos. Elabora más de 16.000 productos y exporta el 30% de su producción.