La canadiense Nutrien se niega a realizar inversiones en su planta de Bahía Blanca
A pesar de los pedidos del gobierno argentino, la empresa propietaria junto a YPF de Profertil, la mayor planta de urea del país, demora la millonaria inversión que requiere su ampliación: alrededor de 1.300 millones de dólares. El gobierno nacional presiona para poder exportar a Brasil.
En Ingeniero White y desde hace 21 años se encuentra la planta de Profertil, productora de urea, el fertilizante que agrega nitrógeno al suelo y es imprescindible para los cultivos de maíz y trigo. Profertil es producto de la unión entre YPF y la empresa canadiense Nutrien.
Invirtieron US$ 705 millones de la época que actualizados representan unos US$ 2.000 millones, si se consideran inversiones por otros US$ 500 millones. Esta fábrica es uno de los motores de la economía de Bahía Blanca y una de las más modernas del mundo: produce anualmente 1.400.000 toneladas de Urea Granulada, contabiliza 362 empleados directos, más de 1.500 contratos indirectos y supera los 850 proveedores.
Tiene, además, terminales logísticas en Necochea, San Nicolás y Puerto General San Martín en Santa Fe.
YPF y Nutrien comparten el paquete accionario de Profertil a tal punto, que se turnan cada dos años para dirigir la empresa. La semana pasada arrancó Marcos Sabelli en nombre de YPF y en reemplazo de Federico Veller, que la condujo en representación de Nutrien.
Pero antes de este previsto cambio de timón, comenzaron las desavenencias con los canadienses. El motivo es que YPF plantea poner en marcha la ampliación de la planta, la cual costaría US$ 1.300 millones, y serviría para posicionarse en un mercado muy demandado, sobre todo en este contexto donde Rusia disminuyó sus exportaciones a raíz de la invasión a Ucrania.
El estudio de factibilidad para ampliar la planta fue aprobado en varios niveles y cuenta con la imprescindible licencia social y ambiental. La intención es duplicar la producción. Los canadienses son reticentes a desembolsar su parte para esta inversión. Trascendió que desde la casa matriz no aprueban el monto para una “Argentina tan incierta”.
Por lo que deslizaron, Sabelli llega con el mandato de apurar a sus socios en la decisión y en caso de continuar esa resistencia comprarles la parte. En Ingeniero White se comenta que les pagarían con producción.
En YPF admiten que las negociaciones se dan en “muy buenos términos con Nutrien”. Sabelli hasta antes de asumir el liderazgo se desempeñaba como vicepresidente de Estrategia y Desarrollo de Negocios de la petrolera, donde elaboró su plan de crecimiento.