Los embarques salen de San Antonio Oeste, hacen escala en Brasil, y arriban a Rusia, principal comprador de la producción del Alto Valle.
Peras y manzanas que se producen en el Alto Valle rionegrino con destino a Rusia parten esta semana hacia Brasil, donde realizan una escala, para luego sí dirigirse a las góndolas rusas. Más de 600.000 toneladas de frutas son las que se exportarán desde San Antonio Oeste hacia el país euroasiático.
Se espera que durante esta campaña, de la cual este envío representa la primera partida, sea un 20 % superior a su predecesora, azotada por la sequía y las fuertes tormentas.
Al respecto, el secretario de Fruticultura rionegrino, Facundo Fernández, destacó las “condiciones favorables de la cosecha y la recuperación de una producción de calidad, que cumple con los estándares internacionales y que vuelve a posicionar a la provincia como una de las principales exportadoras”.
“Este año, hasta ahora, el clima es más acorde a lo que caracteriza al Alto Valle: no sufrimos heladas tardías ni tormentas de granizo, con lo cual la producción de pera se acerca más a la clásica del Valle: más limpia y sin defectos”, indicó.
Asimismo, resaltó que, “si bien el esquema de costos es muy alto, también hay una gran expectativa por el tipo de cambio favorable, lo que empuja el motor exportador que la provincia tiene”.
Con respecto a Rusia, principal comprador de la fruta rionegrina, Fernández sostuvo que “por la guerra entre ese país y Ucrania, varias navieras cortaron el ingreso de nuestros productos, situación que este año se pudo planificar mejor, con lo cual vamos a recuperar las ventas que por el conflicto habíamos perdido”.
La cosecha de la pera y la manzana en el Valle rionegrino permite generar, cada año, un importante volumen de mano de obra con actividades que se extienden hasta el mes de mayo.