Las reservas cayeron entre un 15 y un 20 % respecto de las registradas a fines del año pasado.
La temporada de verano en la provincia de Neuquén podría convertirse en una de las peores de los últimos años, a partir, al menos, de lo que reflejan los números de las reservas y de las expectativas que tienen los operadores turísticos.
Según los datos que maneja el Ministerio de Turismo, las reservas cayeron entre un 15 y un 20 % promedio, respecto de las que había para fines de 2022.
San Martín de los Andes, por ejemplo, registra un 50 % de reservas cuando para la temporada pasada se computaba a esta altura del año un 65 %. Lo mismo puede decirse del otro destino importante como es Villa La Angostura.
“Las medidas económicas, claramente, han retraído la decisión de reservar. La realidad es que estas mismas medidas económicas van a generar una especie de demanda espontánea después. Eso creemos”, observó Gustavo Fernández Capiet, ministro de Turismo de la provincia.
Lo que se espera es que el gran flujo de visitantes hacia los centros turísticos de la provincia provenga del Alto Valle de Río Negro y Neuquén. “Ese turista hoy, probablemente, antes de ir a Córdoba u a otro lugar más lejos, vaya a Junín, San Martín de los Andes, al norte neuquino, o elija la zona centro como Villa Pehuenia o Caviahue”, señaló Capiet.
Los valores y la modalidad de pago para alquilar un determinado alojamiento es otro de los factores que influyó en la caída de las reservas. Más allá de los precios, que varía según la categoría de lo que se busque, se dio una especulación de parte de los propietarios vinculada al proceso inflacionario, que hizo que mucha gente decidiera no contratar.
“Hay una volatilidad de precios y se dio un mecanismo que no colaboró. Por ejemplo, si una habitación vale cien pesos y uno deposita el total la tiene asegurada a ese valor. Ahora, si de los cien pesos depositó cincuenta, probablemente ese otro cincuenta quede congelado y en enero se revisa a cuánto se cancela. Muchos lo acordaron al valor del dólar blue”, explicó el ministro.
Chilenos
El otro flujo importante de turistas que se espera que llegue sin reserva a buscar alojamiento en las diferentes plazas de la cordillera es el chileno.
“Ellos no tienen por modalidad reservar, sino cruzar y buscar un alojamiento. Del otro lado de la frontera tenemos cuatro millones de chilenos, y la realidad es que Argentina para ellos sigue siendo barata”, dijo Capiet. “Con lo cual, creemos que desde Chile va a llegar mucha gente, algo que ya percibimos los fines de semana, como en este último de Navidad”, advirtió.
“Responder a esa demanda espontánea y cómo manejarla va a ser una situación del día a día. Y esto va a ocurrir en todos los destinos turísticos del país. Pero nosotros con el turismo extranjero tenemos una ventaja, por ejemplo, respecto a los destinos de la costa”, indicó el ministro neuquino y agregó: “En estos lugares, al igual, por ejemplo, que en Córdoba, tienen poco turista extranjero y están asustados porque los números en esta previa de la temporada no son buenos. Nosotros no entramos en pánico, aunque sí sabemos que hay una cierta incertidumbre respecto de los porcentajes de ocupación que vamos a tener”.



