Con un cupo de 400 millones de pesos, las empresas podrán acceder a beneficios fiscales a cambio de invertir en formación profesional de trabajadores ocupados y desocupados.
La Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social aprobó el Programa Crédito Fiscal correspondiente al año 2025, destinado a fomentar el empleo y la formación profesional, mediante la Resolución N° 437/2025 publicada este jueves en el Boletín Oficial.
De esta manera, el área dependiente del Ministerio de Capital Humano estableció los objetivos, cupo de crédito fiscal a afectar, líneas de acción y procedimientos para la ejecución del crédito fiscal disponible durante el corriente año.
La normativa establece que el mencionado plan “tendrá por objetivo fortalecer las competencias laborales de trabajadores ocupados y las condiciones de empleabilidad de trabajadores desocupados para mejorar sus posibilidades de inserción laboral e incrementar la productividad y la competitividad de las empresas y de las cooperativas de trabajo”.
El cupo total de crédito fiscal para este año se fijó en 400 millones de pesos, que será distribuido por regiones del país sobre la base de la cantidad de empresas activas con cuatro o más empleados en cada región.
Al programa pueden acceder micro, pequeñas y medianas empresas según clasificación SEPyME, grandes empresas y cooperativas de trabajo, presentando una propuesta de capacitación. No podrán participar las empresas o cooperativas que se encuentren incluidas en el Registro Público de Empleadores con Sanciones Laborales (Repsal).
En caso de que la propuesta sea aprobada, se deberá dar inicio a la ejecución y una vez completada se realizará la rendición económica, que si es aprobada habilitará la emisión de un Bono Fiscal a favor de las empresas y/o cooperativas de trabajo responsables para cancelar obligaciones impositivas nacionales
El monto máximo financiable por propuesta varía según el tipo de entidad. Las MiPyMEs y cooperativas pueden financiar hasta el 30 % de la masa salarial o retornos de los últimos doce meses, con un tope de 6 millones de pesos, mientras que las grandes empresas pueden financiar hasta el 0,8 % de su masa salarial, también con un tope de 6 millones.
Las propuestas podrán ampliarse hasta un total de 10 millones de pesos cuando incluyan acciones dirigidas a trabajadores desocupados y/o realicen acciones sobre organismos de la cadena de valor.
Las capacitaciones podrán llevarse a cabo en modalidad presencial, virtual sincrónica, semipresencial o virtual autoasistida, con una carga horaria de entre ocho y 120 horas. Las propuestas podrán ser de formación cerrada (a medida de la empresa) o abierta (de oferta general). No se admitirán cursos terciarios, de grado o posgrados.
El programa permite incluir la adquisición de equipamiento para instituciones formadoras, siempre que no supere el 50 % del presupuesto del curso y que el material permanezca afectado a la formación por al menos cinco años.