Tras el reclamo de los gobernadores, el gobierno nacional puso en pausa por noventa días la medida que permitía ingresar carne con o sin hueso más allá del río Colorado, algo que actualmente no está permitido por cuestiones sanitarias.
El gobierno nacional suspendió por noventa días la resolución del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) que habilitaba el ingreso de carnes con o sin hueso, cárnicos y material reproductivo, desde las zonas libres de fiebre aftosa con vacunación hacia la Patagonia, región del país donde no se aplica la inmunización, luego de que los gobernadores cuestionaran la medida en duros términos.
En un principio, la medida había sido dispuesta con efecto inmediato, pero tras los pronunciamientos de diversas administraciones patagónicas, que, junto con entidades rurales, denunciaron que la iniciativa fue llevada adelante de manera inconsulta y amenazaron con ir a la Justicia, el ministro de Economía, Luis Caputo, accedió a una prórroga por tres meses, en los que se creará una mesa de diálogo con los distritos a fin de acercar posiciones.
En la normativa, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) dispuso prorrogar por noventa días corridos la entrada en vigencia de la adecuación de las exigencias sanitarias para el tránsito de carnes y material reproductivo entre las zonas libres de fiebre aftosa con y sin vacunación.
La voz de Río Negro y Neuquén
Los mandatarios provinciales que alzaron la voz públicamente fueron Alberto Weretilneck de Río Negro y Rolando Figueroa de Neuquén, rechazando su puesta en marcha y defendiendo el estatus sanitario que lleva más de veinte años.
En el caso del rionegrino, cuestionó la decisión indicando que “destruye lo que miles de productores construyeron durante dos décadas” al asegurar que “la Patagonia es libre de fiebre aftosa sin vacunación gracias al trabajo de nuestros ganaderos y frigoríficos, pero ahora, desde un escritorio en Buenos Aires, un burócrata pretende borrar todo de un plumazo para favorecer a los grandes supermercados y exportadores”.
Además, desestimó una eventual reducción de los valores de la carne para el público como argumenta el gobierno nacional, señalando que “es mentira”, ya que “si realmente fuera así, la carne sin hueso que ingresa desde el norte tendría el mismo precio que en otras provincias, pero eso no sucede” y sostuvo que “lo único que genera es el quiebre de frigoríficos, la pérdida de empleos y el cierre de establecimientos productivos”.
Por otro lado, expresó que “si el objetivo real es mejorar el estatus sanitario del país, la solución es clara: levanten la vacunación en todo el territorio nacional y tengamos un solo estándar sanitario”, y afirmó que “destruir la barrera sanitaria de la Patagonia no es el camino”.
Figueroa, por su parte, manifestó que “nuestro objetivo es reducir los precios de la carne, pero para lograrlo, no podemos comprometer el estatus sanitario que hemos alcanzado en nuestra región y debemos proteger a los productores que reciben muy poco, a pesar de haber cuidado durante veinte años dicho estatus”.
La Mesa de Diálogo y Trabajo
Ante este panorama, en el artículo 2 del texto oficial, el Gobierno cursó una invitación a los gobernadores de Río Negro, de Neuquén, de Chubut, de Santa Cruz, de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur y de Buenos Aires, y a entidades representativas del sector agropecuario a constituir la Mesa de Diálogo y Trabajo.
El mencionado espacio funcionará en el ámbito de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca y servirá para trabajar “conjuntamente los alcances y la coordinación de acciones tendientes a la implementación de las medidas establecidas”.
Al fundamentar el llamado al diálogo, la administración de Javier Milei reconoció que “las provincias que integran la Región Patagónica han realizado consultas y pedidos relacionados con la temática de la mentada Resolución 180/2025”.
Frente a este escenario, consideró que “a fin de dar respuesta respecto de los alcances y la coordinación de acciones tendientes a la implementación de las medidas establecidas en la mencionada Resolución, deviene necesario conformar una mesa de diálogo y de trabajo integrada por representantes de dichas jurisdicciones”.
El gobernador neuquino confirmó la suspensión de las medidas del Senasa y aportó que la mesa de trabajo actuará “bajo tres preceptos fundamentales: trabajar junto a los productores para potenciar las economías regionales, establecer normas específicas que salvaguarden la sanidad y el estatus sanitario, y lograr coherencia en el establecimiento de precios para que los consumidores no sean los principales perjudicados”.
La decisión de permitir el ingreso de carnes (con o sin hueso), productos cárnicos y material reproductivo, desde las zonas libres de Fiebre aftosa con vacunación hacia regiones del país donde no se aplica la vacunación, implicó que el Senasa modifique las condiciones sanitarias, lo que generó el malestar de los gobernadores patagónicos.
Desde el ente gubernamental manifestaron que la adecuación “está en línea con las recomendaciones de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) y establece pautas sobre la maduración, empaque, procesamiento y transporte de carnes, así como requisitos sanitarios específicos para el material reproductivo”.
Asimismo, precisaron que “el objetivo es garantizar la sanidad del ganado y la inocuidad de los productos, sin afectar la comercialización o el abastecimiento interno, ni el mantenimiento de los mercados con otros países”.