Dilema: ¿vacas más grandes es igual a mayor rentabilidad?

El riesgo latente es que un biotipo demasiado grande comprometa la fertilidad de las hembras de reposición y extienda los plazos necesarios para la recría y el engorde.
Las vaquillonas de reposición necesitan mayores requerimientos nutricionales para alcanzar la pubertad y entrar en servicio.

La carne argentina se mantiene como un producto altamente demandado en los mercados internacionales. Para satisfacer a los compradores más exigentes, el país necesita ofrecer novillos más pesados de los que tradicionalmente se consumen en el mercado interno.

En este contexto, los rodeos de cría, encargados de generar los terneros que luego pasan por recría y engorde, cumplen un papel fundamental.

Un reciente estudio del INTA Cuenca del Salado ha puesto bajo la lupa una estrategia que vuelve a cobrar relevancia: incrementar el tamaño de la vaca como vía para aumentar el peso de faena de los novillos.

La estrategia y sus consecuencias

El trabajo del INTA analizó las ventajas y desventajas de seleccionar toros de mayor tamaño dentro de la misma raza, buscando lograr descendencias más pesadas sin modificar el biotipo británico que predomina en la región.

La selección de toros más grandes puede ser una herramienta efectiva para ganar kilos de res y acceder a los mercados que demandan novillos pesados.

Al seleccionar toros de mayor tamaño no solo se obtienen novillos más pesados, sino también vaquillonas de reposición con mayor peso adulto.

Sin embargo, esta ventaja trae consigo una consecuencia inmediata: las vaquillonas de reposición necesitan mayores requerimientos nutricionales para alcanzar la pubertad y entrar en servicio.

El equipo de INTA Cuenca del Salado plantea un interrogante clave: ¿se puede incrementar el tamaño de la vaca sin afectar la eficiencia reproductiva y la rentabilidad?

En los sistemas pastoriles de la región, donde los recursos forrajeros son a menudo limitados, el aumento de tamaño puede ser problemático.

Las vacas más grandes pueden retrasar su madurez sexual, lo que dificulta la preñez temprana y compromete la eficiencia reproductiva general. Además, un incremento de tamaño podría traducirse en vacas con una condición corporal insuficiente para ciclar y preñarse en tiempo y forma en entornos pastoriles limitados.

El riesgo latente es que un biotipo demasiado grande comprometa la fertilidad de las hembras de reposición y extienda los plazos necesarios para la recría y el engorde.

Balance costo/beneficio

Actualmente, se han iniciado ensayos comparativos para evaluar el desempeño de distintos biotipos en sistemas de ciclo completo. Aunque la selección de toros más grandes ofrece una vía para obtener novillos más pesados, los productores deben evaluar cuidadosamente la relación costo/beneficio.

Los investigadores enfatizan que la eficiencia reproductiva y el costo de alimentación son factores determinantes en la rentabilidad final del sistema de cría.

El desafío productivo radica en encontrar el equilibrio adecuado entre el tamaño de la vaca, la fertilidad del rodeo y el peso de faena de los novillos, utilizando información local para guiar las decisiones de los productores.

Fuente: visionrural.ar