El ingeniero Livio Dante Porta, nació el 21 de marzo de 1922 en Paraná. Estudió en el Colegio Salesiano y allí tuvo sus primeros contactos con el ambiente ferroviario. Conoció y entabló amistad con Gino Margutti, quien luego fue empleado por el Ferrocarril Central Argentino en los distintos escalafones hasta llegar a maquinista de Primera.
Ingresó a la carrera de Ingeniería en la Universidad Nacional del Litoral en Rosario, graduándose en 1946 con apenas 24 años. Casi tres años después había diseñado su primer gran trabajo, la locomotora 4-8-0 de 4 cilindros hecha a partir de una 4-6-2 del ex Ferrocarril Central Córdoba.
Porta trabajó para demostrar que la locomotora de vapor estaba aún lejos de alcanzar su máximo potencial. El trabajo consistió en partir de los restos de una locomotora tipo Pacific de trocha métrica y convertirla en una de cuatro cilindros llamada “Presidente Perón” o “Argentina”. Ésta, alcanzó 2500 HP y obtuvo records de relación peso/potencia y eficiencia, algunos de los cuales permanecían vigentes 60 años después.
Entre 1952 y 1957 mantuvo un contrato con el Ministerio de Transporte argentino para la construcción de diez locomotoras y la modernización de aproximadamente un centenar. En estas locomotoras aplicó por primera vez el concepto del eyector Lempor, de su invención, cuyos aspectos teóricos publicó y perfeccionó años después. Con esta innovación, Porta logró un significativo incremento de potencia en esas máquinas aprovechando al máximo el vapor.
También mejoró los viejos motores con el denominado “Sistema de combustión a la gasógena” – conocido internacionalmente como GPCS (Gas Producer Combustion System) – que consistía en reducir la formación de clinker (carbón calcinado) y la cantidad de combustible sin quemar mediante la inyección de vapor debajo de la cama de carbón, y de esta forma mejorar la combustión y el aprovechamiento de la energía liberada por el carbón que era hasta entonces desperdiciada en gran medida.
En 1960 se radicó en la localidad bonaerense de Banfield hasta 1982. Durante esos años se desempeñó en el Centro de Investigación y Desarrollo para el Uso Eficiente del Combustible (CIPUEC) y desde 1966 como Jefe del Departamento de Termodinámica del Instituto Nacional de Tecnología Industrial.
En 1969 resolvió un serio problema de calidad de agua que afectaba a las locomotoras en uso en la Argentina. Porta realizó un prototipo sobre la locomotora 1802 del Ferrocarril Belgrano, una Baldwin 4-8-2 en la que instaló un sistema de tratamiento de agua basado en el francés TIA (Traitement Integral Armand) y otras modificaciones. El resultado fue tan exitoso que redujo la necesidad de limpieza a fondo de la caldera a dos veces por año. Esta innovación es conocida como “Tratamiento Porta”.
Publicó numerosos artículos técnicos y de divulgación y a principio del 1983 se jubiló. Los trabajos del Ing. Porta en la tecnología del vapor para el ferrocarril fueron revolucionarios, llevando a límites insospechados de eficiencia en potencia y ahorro de combustible (con menor contaminación) tanto a las viejas locomotoras restauradas, así como a las nuevas fabricadas.
Livio Dante Porta falleció el 10 de junio de 2003 en la Ciudad de Buenos Aires cuando aún sus servicios eran requeridos por gobiernos de otros países.