A la par de la recuperación del consumo y la apertura comercial, marcas de Brasil aprovechan la oportunidad y se instalan en Argentina, en muchos casos de la mano de operadores locales.
Desde Brasil, con modelos que funcionaron en un mercado más grande y complejo como es el del país vecino, llegan a la Argentina franquicias de diversos rubros, motivadas también por una recuperación gradual del consumo y las medidas aperturistas del gobierno nacional. Desde alquiler de herramientas a entrenamiento localizado, ya son más de 55.000 sitios comerciales en distintos puntos del país y se espera para este año un crecimiento del 8 %.
Uno de los casos más resonantes es el de Casa Do Construtor, que se especializa en alquilar maquinaria y herramientas para obras, reformas y mantenimiento, con un plan enfocado en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), pero con un modelo de negocios apto para ciudades con más de 40.000 habitantes.
Bruno Arena, director de la empresa en Argentina, aseguró que el país representa una gran oportunidad para un modelo de negocio que ya opera con más de 700 franquicias en Brasil. «Tanto empresas como particulares buscan soluciones prácticas y económicas para acceder a herramientas sin hacer una gran inversión inicial. La Argentina es un mercado en expansión para esta propuesta», explicó.
Según Arena, la firma ya mantiene conversaciones con más de diez potenciales franquiciados en distintas provincias. «Contamos con tres modelos de franquicia adaptables. Uno de conversión, otro compacto para centros comerciales y el modelo tradicional con mayor volumen de negocio. Cada uno contempla niveles distintos de inversión, operación y rentabilidad», detalló.
El mercado de cuidado personal y bienestar
Los cuidados personales y el bienestar tanto físico como emocional son cada vez más importantes y generan un mercado que aún no ha sido lo suficientemente explotado. En ese sentido, arribó al país Buddha Spa, una firma brasileña enfocada en terapias integrales y experiencias de relajación, que también apuesta por el modelo de franquicias.
Amanda Zanzotti, ejecutiva de expansión de la marca, destacó que su análisis se basó en proyecciones de crecimiento para este rubro. «El mercado argentino podría superar los 1.400 millones de dólares para 2029. La demanda de tratamientos holísticos crece, especialmente entre profesionales urbanos que buscan aliviar el estrés», explicó.
El modelo de franquicia de Buddha Spa parte desde una inversión de 120.000 dólares, que incluye la tarifa de ingreso, las obras, la decoración y todos los recursos necesarios para operar. Ofrecen tres formatos según la superficie: locales a la calle de entre 200 y 400 metros cuadrados, unidades en centros comerciales de hasta 100 metros cuadrados y espacios integrados en hoteles, gimnasios o salones desde 40 metros cuadrados. La marca proyecta abrir al menos diez locales en Argentina en los próximos dos años, con foco en ciudades como Buenos Aires, Mendoza, Córdoba y Rosario.
Otra franquicia que se ubica dentro del mismo rubro, el de los cuidados personales y el bienestar personal, es Smart Fit, la cadena de gimnasios de origen brasileño con presencia regional, que busca instalarse también en Argentina. Según detalló Andrés Menéndez, gerente de franquicias, la marca busca estar presente en todos los países de Latinoamérica. La inversión inicial parte desde los 800.000 dólares e incluye adecuación de espacios, equipamiento, software de gestión y soporte integral.
A diferencia de otros modelos, el de Smart Fit contempla un acompañamiento permanente de parte de sus equipos técnicos y gerenciales. La marca busca garantizar estándares uniformes en todas sus operaciones, desde el mantenimiento de los equipos hasta la atención al cliente. En cuanto al rol del franquiciado, Menéndez indicó que debe supervisar la operación general y asegurar el cumplimiento de los lineamientos definidos por la marca.
Sea cual fuera la iniciativa que el inversor elija, todas requieren compromiso y capacidad de innovación. Aún así, el modelo de franquicias representa una opción diferente a los negocios tradicionales ya que la transferencia de conocimiento, la estructura de marca y la asistencia en la gestión ayudan a reducir riesgos y a profesionalizar el emprendimiento desde el inicio.
En un contexto de estabilidad, pero que todavía muestra síntomas de incertidumbre, las oportunidades igualmente comienzan a crecer. La llegada de firmas de Brasil no sólo representa un hecho comercial, sino también una declaración de intenciones a la hora de pensar economías integradas y con funcionamientos similares, donde un modelo que fue probado y funciona en determinada región tendrá la misma suerte en un sitio similar.