El negociador principal del bloque para el Tratado de Libre Comercio con el Mercosur, Rupert Schlegelmilch, aseguró que es de carácter prioritario y podría ser oficilizado en junio.
Los 27 países miembros de la Unión Europea (UE) y los estados fundadores del Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay) lograron en 2019 un acuerdo político para avanzar hacia un Tratado de Libre Comercio (TLC). Recientemente, Rupert Schlegelmilch, jefe negociador de la UE para el Tratado, aseguró que es un asunto prioritario para la economía de los países que integran el bloque y, a raíz de eso, que tratarán de cerrarlo lo antes posible.
«Más allá de las coyunturas, este acuerdo se ha mantenido como una prioridad para nosotros. Es una prioridad absolutamente», señaló Schlegelmilch al iniciar en Uruguay una gira por Sudámerica.
El objetivo del TLC es eliminar la mayoría de los aranceles entre ambas regiones, creando así un espacio comercial que abarque a más de 700 millones de consumidores y represente aproximadamente una cuarta parte del Producto Bruto Interno (PBI) mundial.
Destaca la preocupación de algunos sectores, como los agricultores franceses, respecto de la posibilidad de enfrentar una competencia desleal una vez que el acuerdo entre en vigor. Además, existen desacuerdos significativos en torno a la protección de la Amazonía en Brasil, un tema delicado que está siendo discutido con los países del Mercosur.
A pesar de estos desafíos, Schlegelmilch destacó el progreso en las conversaciones con Brasil y el enfoque pragmático de Uruguay en las negociaciones, mientras elogió la actitud constructiva de Argentina bajo la administración de Javier Milei. Cuando se le preguntó sobre el cronograma para finalizar el TLC, Schlegelmilch expresó el deseo de concluirlo «lo más rápido posible», señalando que podría ser una realidad para junio o julio.