Ganó en el Campeonato Mundial del Alfajor 2025 y ya empezó a aparecer en mostradores de barrio y cadenas. Nacido en Lanús Este, El Barrigón Chingolo se llevó la Medalla de Oro al Mejor Alfajor Triple del Mundo y la Medalla de Plata como segundo Mejor Alfajor Industrial con una receta de tres capas, dulce de leche y frutilla.
La cuarta edición del Mundial se realizó en Costa Salguero (CABA) y reunió a más de 70 stands y 120 marcas. En ese escenario, la pareja emprendedora de Lanús, Alexia Mazza y Matías Bello, fundadores de El Barrigón Chingolo, se llevó todas las miradas: oro al Mejor Alfajor Triple y plata como Mejor Industrial. La combinación de volumen de relleno, baño de chocolate y presentación terminó convenciendo al jurado —y al público que hizo fila en su stand.ç
Una marca de barrio con ambición nacional
Fabricado en Lanús Este, El Barrigón Chingolo creció con una fórmula simple que conecta con la tradición argentina: mucho dulce de leche y una identidad bien barrial. En un contexto donde proliferan los sabores “Dubái” y el pistacho, el sello de Chingolo se consolidó en Zona Sur y comenzó a ganar presencia en CABA, apalancado por lanzamientos que suman variedad sin perder el ADN del producto.
Una marca de barrio con ambición nacional
Para el Mundial, Mazza y Bello presentaron más de cuatro variedades e introdujeron su nueva joyita, El Gordinflón: triple y con “exceso” de dulce de leche. Tras el podio, la marca amplió distribución y ya se consigue en kioscos y comercios —con versiones cubiertas en chocolate negro y blanco—, apuntando a un público que busca alfajores con impronta casera pero producción industrial consistente.
El fenómeno Barrigón reabre una pregunta que cruza jurados y consumidores:
¿se encamina a convertirse en un nuevo clásico de kiosco o quedará como la estrella de esta temporada?