La producción de huevos creció un 10,2 % en 2024 y finalizó con 17,4 millones de unidades. El consumo también creció y en un año pasó de 336 unidades por persona a 363. Argentina es el segundo mayor consumidor del mundo.
En 2024, la producción de huevos en Argentina creció un 10,2 %, al pasar de 15,8 millones de unidades a 17,4 millones, de acuerdo a la Cámara Argentina de Productores e Industrializadores Avícolas (Capia). Esto fue posible a partir de una mejora en el parque productivo argentino del 8,6 %: el stock creció de 53,1 millones de aves de postura en 2023 a 57,7 millones el año pasado.
Hay otro dato analizado por la entidad que resulta revelador del empuje de esta cadena en Argentina: el año pasado se produjeron en promedio 553 huevos por segundo. De ese volumen, un 98 % se destinó al mercado interno.
“Con las nuevas mediciones de 47 millones de habitantes/consumidores en el país, el crecimiento de los volúmenes destinados a dicho mercado fue del 11,2%”, calcularon.
El consumo también creció fuertemente
Al momento de medir el consumo interno, Argentina creció de 336 unidades por habitante en 2023, a 363 unidades consumidas el año pasado. Es un 7,9% de incremento, equivalente a 23,5 kilos de huevo por habitante por año, cifra que posiciona a nuestro país como el segundo consumidor del planeta, detrás de México, con 378 unidades, y delante de Colombia, con 343.
En el podio de provincias productoras, Buenos Aires ocupa el primer puesto, con 23 millones de aves (39,8 %) seguida por Entre Ríos (17,2 millones y 29,9 %) y Córdoba, con 5 millones que representan el 8,6 % del total.
Por el lado del mercado externo, tuvo un crecimiento del 15 % en volúmenes exportados con respecto al año 2023 y se destinó un 2 % del huevo producido en 2024. En contrapartida, el ingreso de divisas cayó un 7,7 %.
El precio de los huevos, por debajo de la inflación
Un dato para destacar es que la caja de huevos aumentó un 56,7 % entre enero y diciembre del año pasado, versus un Índice de Precios al Consumidor (ICP) que registró una suba de 117,8 % en el mismo período.
Las relaciones de compra entre maíz y cajones de huevos también mostraron un saldo favorable. Entre 2023 y 2024, pasó de 5,98 cajones por tonelada de maíz a 4,08 cajones, una reducción de 46,7 %,
Es de destacar que, más allá de esta búsqueda de eficiencia y rentabilidad, esta cadena de valor no descuida el impacto ambiental de la producción.
“Nuestro compromiso innegociable con el país, con la mesa de los argentinos, nos pone en el reto diario de producir más, mejor y a precios accesibles, sin dejar de lado las buenas prácticas de producción”, mencionaron.
De este modo, remarcaron que siguen capacitando al personal que trabaja en la actividad, “incorporando tecnología, ampliando granjas, generando arraigo, dando valor agregado al maíz y soja, cuidando el medio ambiente para producir el alimento más saludable, nutritivo y económico”, agregaron.