Viajaron 4,3 millones de turistas por las vacaciones de invierno. La mayoría de las provincias estuvieron por debajo del invierno pasado, afectadas por la situación económica y la menor presencia de turistas internacionales frente a un tipo de cambio menos favorable. De acuerdo con los datos de CAME, el gasto promedio diario por turista rondó los 89.000 pesos y la estadía media fue de 3,9 días.
Con el cierre del receso invernal, el turismo argentino volvió a mostrar su peso en la economía, aunque esta vez con matices. Según datos de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), 4,3 millones de turistas se movilizaron por el país durante las vacaciones de invierno 2025, generando un impacto económico de 1,5 billones de pesos, equivalentes a 1.163 millones de dólares. Sin embargo, la cifra representa una caída del 10,9 % en la cantidad de viajeros respecto al año pasado y un descenso del 11,2 % en términos reales.
En estas vacaciones, los turistas de mayor poder adquisitivo eligieron salir al mundo, mientras que el turista que se quedó en Argentina eligió mayormente los destinos en base a las ofertas y a las promociones encontradas. Si bien el informe elaborado por el sector Turismo de CAME sólo contabilizó turistas, cabe destacar que hubo un número considerable de excursionistas que se desplazaron por todo el país.
La estadía media bajó de 4,1 días en 2024 a 3,9 este año y el gasto diario promedió los 89.236 pesos que, a precios reales (es decir, descontando la inflación), resultó un 4,8 % superior al año pasado.
Un contraste que pone en evidencia la difícil situación del sector turístico es la comparación con 2023: viajó un 21,5 % menos de gente que ese año y la estadía media se redujo 13,3 % desde los 4,5 días de dos años atrás.
Hot Sale y vacaciones escalonadas
Un dato que anticipó la mayor tendencia a viajar fuera del país fue el Hot Sale de mayo, donde más de la mitad de las ventas fueron a destinos internacionales. Además, según el último informe del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), los viajes internacionales crecieron 67 % interanual en el primer cuatrimestre del año.
También hubo efectos positivos, como el escalonamiento de las vacaciones escolares, que permitió tener movimiento durante las cuatro semanas del mes de julio y evitó la sobrecarga de las rutas nacionales. Además, le dio a la gente un abanico más amplio de opciones de alojamiento para mejorar precios.
Frente al frío y el clima inestable, las zonas de playas estuvieron más relegadas y los viajeros se inclinaron por opciones de montaña, nieve, termales y turismo rural.
Este año sobresalieron destinos tradicionales como Bariloche, Puerto Iguazú, los valles y las sierras cordobesas, Ushuaia, San Martín de los Andes, Villa La Angostura, Mendoza, Salta, El Calafate y los complejos termales de Santiago del Estero y de Entre Ríos.