México suspendió exportaciones de dos frigoríficos pampeanos por «incumplimientos sanitarios». Tras una auditoría que realizaron expertos de México entre los días 8 y 22 de marzo se decidió la suspensión bajo el argumento de que se detectaron “fallas en el cumplimiento de los requisitos sanitarios esenciales”.
Desde la Asociación Agrícola Ganadera de La Pampa (AAGLP) se muestran alarmados y afirman que “es un tema que preocupa y deseamos que se resuelva rápidamente por parte de la industria frigorífica para mantener los mercados actuales”.
¿Por qué suspendieron las exportaciones?
El Senasica, como se llama el servicio sanitario de ese país, informó en una carta dirigida al Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) que “ha decidido suspender la autorización de exportación, a partir de la fecha de emisión del presente oficio, a las diez plantas que actualmente se encuentran autorizadas”, así como también negarle la habilitación a otros tres frigoríficos que aspiraban a vender su carne en dicho país.
La situación alcanza en total a diez frigoríficos argentinos, entre los cuales hay dos firmas que trabajan en La Pampa: Carnes Pampeanas S.A. e Importadora y Exportadora de la Patagonia S.A., más conocida como La Anónima, que explota el frigorífico de Speluzzi. Actualmente, hay 27 plantas habilitadas de Argentina para vender carne a México, por lo cual es un problema que afecta a un porcentaje muy significativo de los establecimientos.
Si bien el documento oficial habla expresamente del listado de las diez plantas que serán dadas de baja, desde el Senasa, donde relativizan la situación, indicaron que esto se trata de «requisitos a rechequear y armar un plan de acción para revisar las plantas». Según el organismo, no hay suspensiones.
México fue uno de los últimos países que se abrieron para recibir carne argentina, recién en 2022. Apenas representó el 1,2 % de las exportaciones de carne argentina en 2024, pero viene creciendo fuerte: de solo 715 toneladas en 2023 pasó a más de 9.200 toneladas el año pasado.
Más allá de que el informe no impone restricciones retroactivas y de que los cargamentos de carne que se encontraban en viaje a México fueron bien recibidos, lo cual indica que no se encontró nada realmente peligroso, hay preocupación por las posibles consecuencias con otros países. La situación, aunque no es grave, deja en alerta a la industria y no deja bien parado al sistema sanitario.