Según el INDEC, las ventas externas crecieron 7,5 % en los primeros nueve meses de 2025, con fuertes repuntes en agosto y septiembre y un claro impulso de los envíos agroindustriales y energéticos. Los destinos más relevantes fueron China, Estados Unidos e India, mientras Brasil no muestra signos de recuperar el nivel que supo alcanzar.
Ingresando en la última etapa del año, el nivel de las exportaciones argentinas logró consolidarse y repuntar fuertemente. Así lo reflejan los últimos números difundidos por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), que reportó un incremento acumulado de un 7,5% durante los primeros 9 meses del año.
Después de un moderado repunte del 7,5% interanual en julio, las ventas externas lograron crecer un 16,4% en agosto y llegaron hasta un 16,9% durante septiembre, mostrando así un fortalecimiento de esta tendencia positiva.
Sin duda, la diversificación geográfica fue una de las claves para lograrlo. De hecho, destinos como India y varios países de África se consolidan como oportunidades concretas.
En este contexto, China e India se destacaron con subas respecto al año pasado del 29,3% y 57,8%, respectivamente.
El mercado indio se transformó en la revelación del 2025, traccionado por mayor demanda de harinas, aceites y alimentos. Estados Unidos también se destacó con un aumento superior al 23%, pese a las barreras comerciales impuestas por Donald Trump, respaldado en la demanda de energía y manufacturas agroindustriales.
En contrapartida, Brasil registró un declive del 4,9%. Esto significa una advertencia dada la preponderancia del país vecino en el comercio de Manufacturas de Origen Industrial (MOI), por lo que un debilitamiento de su demanda perjudica, principalmente, al rubro automotriz y la actividad metalmecánica de la Argentina.
En lo que respecta a los sectores que más traccionan los envíos al exterior, la energía y el agro tomaron la delantera.
De hecho, un reciente informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) pormenorizó que la agroindustria liquidó un total de 34.500 millones de dólares entre enero y octubre. Con las estimaciones para noviembre y diciembre, el 2025 cerraría en 37.150 millones.
De esta manera, el monto en dólares ingresado por el campo, durante los primeros 10 meses del año, queda solo por detrás de los registros excepcionales de 2021 y 2022, cuando los precios internacionales alcanzaron máximos históricos a causa de la guerra entre Rusia y Ucrania.
Por último, cabe destacar que el sostenimiento de esta dinámica necesitará de una agenda exportadora coordinada entre el ámbito público y privado. Hasta ahora, las cifras de este año son más que auspiciosas. La duda es si este repunte significa un punto de quiebre o se trata solo de una cuestión estacional.



