Para 2025 también habrá una mayor tracción del sector energético en los pedidos de insumos. Aun así, preocupan los costos en dólares y la competencia con el acero importado, principalmente de China.
La producción de acero registró una caída del 26 % interanual en 2024, informó hoy la Cámara Argentina del Acero. Con un total de 256.300 toneladas, la producción de acero crudo tuvo una caída del 24,3 % con respecto al mes anterior y 23,1 % interanual. Por su parte, la producción de laminados en caliente tuvo una caída del 31,4 % intermensual y del 13,1 % interanual.
Durante el mes de diciembre se realizaron paradas de mantenimiento y ajustes de stock debido a la disminución de la demanda. Sin embargo, se proyecta un aumento para 2025, con expectativas favorables en actividades relacionadas con el sector energético.
En el actual contexto, persisten preocupaciones en los temas estructurales que afectan la competitividad para el agregado de valor en la cadena siderometalúrgica. Entre ellas, se destacan el gran peso de los impuestos distorsivos como Ingresos Brutos y tasas municipales que continúan aumentando, además de débitos y créditos bancarios. A esto se suma el aumento de costos locales en dólares y la competencia desleal de productos de toda la cadena provenientes de economías que están fuertemente subsidiadas como China, señaló la Cámara.
Para el año 2025 se espera un nivel de demanda superior al 2024, aunque por debajo los niveles alcanzados en el año 2023, dado que el sector continúa invirtiendo en energías renovables como parte de su compromiso con la descarbonización de los procesos productivos.