Los protagonistas de la celebración que hablan del fin de semana que convocó a miles de personas en la ciudad que tiene la mayor cantidad de cubaniteros de la Argentina.
Luego de dos días de intenso festejo y degustaciones en el Parque de Mayo de Bahía Blanca, la comunidad sigue en sintonía con las sensaciones que deja la Fiesta del Cubanito este año.
Más Industrias habló con algunos protagonistas de este masivo encuentro local para compartir desde adentro la mirada de quienes hicieron que este evento fuera una verdadera fiesta.
Natalia Martirena, directora de Cultura del Municipio de Bahía Blanca, se refirió a lo que significa para la ciudad celebrar una tradición local como la del cubanito. “Esta fiesta se relaciona con la primavera y pone en valor no sólo al producto como un símbolo local, ya que es una ciudad que tiene la mayor cantidad de cubaniteros de la Argentina, sino que empieza a demostrar que se puede poner en valor una trayectoria de nuestra historia”.
“También estimula el sector para producir: se observa que se activan muchas cosas a la vez. Para mí significa una construcción comunitaria y social”, dijo Martirena y resaltó que hubo una enorme participación en esta edición, que superó las expectativas, ya que es un año con más desafíos después de la inundación del 7 de marzo. “Es doblemente merecida esta fiesta”, aclaró con orgullo.
En relación a ediciones anteriores, la funcionaria destacó que se agregaron categorías nuevas —el Cubanito Trayectoria, por ejemplo— y señaló mejoras notables como la selección de los premiados, que tuvo un desarrollo continuo y eficaz.
Los jurados de la Fiesta del Cubanito
Los jurados de la Fiesta del Cubanito 2025 fueron Gabriel Graziano, Aníbal Schwab, Ignacio Gerbino, Martin Santecchia y Matías Torres, que fueron seleccionados mediante un concurso.
Torres, un influencer de la ciudad conocido en redes sociales como Ciudadano Bahiense, compartió con Más Industria su experiencia en el fin de semana que pasó.
“Para mí fue una experiencia extraordinaria. No sólo porque desde niño consumo cubanitos, sino por sentirlo como algo que define a la ciudad de una manera muy propia, sumado al hecho de que en mis redes desde los inicios siempre apoyé e impulsé la idea de una fiesta como la que ahora disfrutamos. El haber sido parte de una tarea tan particular y especial como el ser jurado me dio mucho orgullo”, contó con emoción.
Siguiendo la lógica del reglamento y cuestiones técnicas de evaluación, el influencer aplicó criterios personales a la hora de puntuar. “Presté mucha atención al cuidado y la presentación y la forma en que se equilibraba el sabor del dulce de leche, o los distintos rellenos en cuanto a los de innovación, con la masa en sí del cubanito, que no fuera muy hacia un extremo u otro”, mencionó Torres.
Y agregó con sensibilidad su visión sobre el trabajo de los postulantes. “Ser cubanitero en Bahía Blanca no es sólo una simple cuestión laboral. Estoy seguro de que cada uno de los trabajan en el rubro dedican todo su amor y esfuerzo por darle su toque personal a sus productos. Y, como jurado, puedo asegurar que aún en el cubanito simple o clásico, no había dos iguales. Así es el cariño y pasión que cada cubanitero le pone a su producto, para lograr hacerlo único entre los demás”, apuntó y destacó que la Fiesta del Cubanito promete seguir año a año instalando dulzura y tradición en la ciudad.