Las acciones de la petrolera estatal, la empresa que más aporta a la economía del país, cayeron hasta un 7 % en medio de la incertidumbre sobre su futuro.
Desde Estados Unidos llegaron noticias comprometedoras sobre la situación legal de YPF, que hicieron caer las acciones de la empresa hasta un 7 %, debido a la sentencia negativa de la jueza Loretta Preska en los tribunales neoyorquinos.
En este caso, la Justicia de los Estados Unidos ordenó al gobierno nacional a entregar el 51 % de las acciones que posee de la petrolera a favor del fondo Burford Capital, titular de los derechos del litigio originado en 2012.
Frente a este escenario, el país tiene diferentes opciones, según remarcan los especialistas. Una es apelar la orden de ejecución con el argumento de que el fallo todavía no está firme y que entregar las acciones sería un daño irreparable.
La otra es pedir una suspensión o “stay of execution”, lo que representaría una medida cautelar para congelar el proceso y, si se rechaza, apelar a la Corte Suprema de Justicia de los Estados Unidos.
Otra alternativa es negociar con el propio fondo Burford que en realidad está más interesado en quedarse con dinero que con acciones de YPF. Y lo último, y menos probable, es reforzar la apelación de fondo para que caiga todo el resto.
Cómo reaccionó el mercado
Desde el mercado, en tanto, sostienen que la caída de la acción se debe a un escenario de incertidumbre donde no se sabe qué puede pasar con el rumbo de la petrolera ante un eventual cambio de dirección.
El juicio se originó porque, al estatizar la compañía, el entonces gobierno de Cristina Fernández de Kirchner no cumplió con el estatuto de YPF, redactado durante su privatización, que obligaba a realizar una Oferta Pública de Adquisición al resto de los accionistas. Es decir que Argentina debía ofertar por el total de las acciones de la compañía, no sólo por el 51 %.
De ahí vinieron las sucesivas sentencias en contra por 16.000 millones de dólares que Argentina fue apelando, pero que acumulan un interés de unos 1.000 millones de dólares por año.
El fallo de Preska indica que «se concede la moción de los Demandantes. La República Argentina transferirá sus acciones clase D de YPF a una cuenta de custodia global en BNYM en Nueva York dentro de los 14 días siguientes a la fecha de esta orden; e instruirá a BNYM a iniciar la transferencia de la participación de la República en sus acciones clase D de YPF a los Demandantes o a quienes estos designen dentro de un día hábil a partir del día en que las acciones se depositen en la cuenta».
Y agrega: “convencida de que no es necesario presentar argumentos orales además de los documentos presentados por las partes, se deniega la solicitud de la República para presentar argumentos orales y se solicita respetuosamente al Secretario del Tribunal que concluya el presente caso”.
Desde abril de 2012, la República ha controlado las principales decisiones empresariales y financieras de YPF por medio de su participación mayoritaria en la compañía, señala el escrito. «Las partes acuerdan que la República vota para elegir el directorio y aprobar iniciativas generalmente propuestas por el directorio, incluyendo aquellas que requieren la aprobación de los accionistas bajo las leyes de la República”, agrega.
La importancia de YPF para la economía nacional, no sólo en el apartado energético
Según los últimos datos presentados por la empresa en la Bolsa, correspondientes al primer trimestre de 2025, YPF produjo 261.000 barriles de petróleo por día, el 87 % destinado al mercado doméstico y el 13 % a exportación. Esa cifra representa el 36 % de la producción total de crudo del país. En gas natural, alcanzó los 37 millones de metros cúbicos diarios, con un 6 % exportado y una participación del 29 % en la producción nacional.
En refinación, la compañía opera más del 50 % de la capacidad instalada del país a través de tres plantas con un total de 340.000 barriles diarios. En transporte, administra 2.140 kilómetros de oleoductos y 1.800 de poliductos para productos refinados. Además, es líder en producción petroquímica con una capacidad de 1,7 millones de toneladas anuales —sin contar Profertil— y se destaca en la venta de combustibles con una participación de mercado del 56 % en volúmenes de diésel y naftas.
En el negocio minorista, YPF cuenta con 1.680 estaciones de servicio, lo que representa el 31,9 % del mercado local. La extensión de su red y su integración vertical le han permitido posicionarse, según declaraciones del director de planificación productiva en Fundar, Daniel Schteingart, como la mayor vendedora de café del país por volumen, así como segunda en hamburguesas.
Más allá del tamaño y la capilaridad de su red, el peso económico de YPF es considerable: explica aproximadamente el 1,5 % del PIB argentino (se sitúa por delante de Mercado Libre, que en facturación total y valor bursátil la pasa, pero no en aporte a la economía nacional), con unos 22.000 empleados directos entre operaciones petroleras, refinerías y estaciones de servicio según estimaciones de Schteingart en base a datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) y la Revista Mercado.