Los beneficios netos de Ford se redujeron un 37 % en el tercer trimestre del año para situarse en 991 millones de dólares, según informó ayer el fabricante de automóviles estadounidense.
Ford señaló que la reducción de los beneficios es fruto de los malos resultados en el mercado chino así como del aumento de los costes provocado por los aranceles sobre el acero impuestos por la administración del presidente estadounidense, Donald Trump.
Durante una teleconferencia con analistas y medios de comunicación, el director financiero de Ford, Bob Shanks, afirmó que calcula que las guerras comerciales creadas en los últimos meses por Trump le costarán a la empresa unos 1.000 millones de dólares este año.
[su_note note_color=»#e3e3e3″]La mayor parte de este coste, unos 600 millones de dólares, será consecuencia del aumento del precio de las materias primas. Del resto, 200 millones de dólares están relacionados con los aranceles impuestos a China y otros 200 millones con la cancelación de la importación del Focus Active producido en China.[/su_note]
En los nueve primeros meses de 2018, Ford tuvo unos beneficios netos de 3.793 millones de dólares, un 27,2 % menos que en el mismo periodo de 2017.
Los ingresos del grupo automovilístico en el tercer trimestre ascendieron a 37.666 millones de dólares, un 3,33 % más que hace un año.
Ford incrementó los ingresos en Norteamérica y en Europa
A pesar del aumento de los ingresos, las pérdidas de Ford en China ascendieron a 378 millones de dólares.
Por regiones, Norteamérica tuvo unos ingresos de 22.300 millones de dólares, 1.400 millones más que en 2017.
En Sudamérica, los ingresos se redujeron en 200 millones de dólares a 1.300 millones, mientras que en Europa la cifra ascendió en 500 millones para situarse en 7.400 millones de dólares.
En Asia-Pacífico, Ford ingresó 3.100 millones de dólares, 600 millones menos que hace un año. Y en Oriente Medio y África los ingresos se redujeron en 41 millones hasta 600 millones de dólares.
