La firma Exveca, presente en Santa Rosa, La Pampa, desde 1988, vende productos de medicina, odontología y laboratorio, equipos odontológicos e insumos de mecánica dental, pedicuría y estética, entre otros. Además del local, provee a los ministerios de Salud y hospitales de las provincias de Santa Fe, Neuquén y Entre Ríos.
Su gerente, Franco Russo, habló con Más Industrias sobre el presente de la empresa y las estrategias que aplican para enfrentar una coyuntura que plantea incertidumbre, altas cargas impositivas y faltantes de productos.
¿Cómo empezaron el año?
Arrancó bien el año, aparenta que va a haber movimiento, pero el año pasado fue duro. Al revés de todo el mundo, en la pandemia anduvimos bien porque incrementamos las ventas un poco más de lo normal. Lo que más se incrementó fue la venta en mostrador, que debe haber crecido un 30%. Ahora, bajó lo que es alcohol, barbijos y todo eso, que se consume más que antes porque hay un poco más de conciencia, pero no está como en la pandemia.
Ustedes trabajan con varios insumos importados. ¿Cómo vienen manejando las trabas a las importaciones?
Es la mayor complicación que tuvimos en estos tres años y es un problema que se ha traducido directamente en la reducción de ventas porque, como hay insumos que no tenés certeza de si lo vas a poder conseguir o no, no los podés cotizar para una licitación o un pedido de precios. Antes, las cosas entraban, si no era este mes, para el mes que viene. Como te dan más o menos treinta días para entregar un insumo, si no había ahora ya sabías que para dentro de veinte días había. Ahora, esos tiempos se han ido a setenta días o 120, entonces directamente no lo podés vender. Ni hablar de que en 120 días capaz que cuesta exactamente el doble.
Hay mucha incertidumbre…
Sí, mucha incertidumbre que se traduce directamente en pérdidas de venta porque hay muchos faltantes y no hay certeza de tiempos de entrega. Y después, desabastecimiento de productos específicos. Todos los meses le toca a uno. Por ejemplo: una hoja de bisturí. Hubo un tamaño específico que no entró y hubo dos meses que no tuvimos y no se conseguía en toda la Argentina.
¿Pudieron reemplazar algún insumo importado con otro nacional?
No, eso no existe. Para reemplazarlo tenés que conformarte con algo de peor calidad o resignarte a comprar algo de superior calidad y trasladárselo al cliente, lamentablemente.
¿Cómo lidian con los aumentos de precios?
Para no aumentar al mismo ritmo que nos aumentan los proveedores, lo que hacemos es tratar de hacer compras grandes de vez en cuando para tener mejor precio, pero ya más de dos meses es imposible mantenerlo porque a nosotros todos los meses nos cambian todos los precios todos los proveedores absolutamente. Si compramos grandes cantidades y tenemos stock suficiente tratamos de mantener el precio, pero con muy pocas cosas se puede hacer eso. Por ejemplo, con el alcohol. Al lado mío debo tener setenta litros de alcohol, porque se compra por pallet. Dos, tres meses el mismo precio he llegado a mantener, pero eso no quiere decir que el fabricante no haya aumentado.
Son estrategias…
Sí, son estrategias para más o menos ser competitivo, pero es imposible porque acá el 90% de los artículos son importados. Los precios cambian diariamente, no mensualmente. Y el dólar, al moverse todos los días, la semana que viene ya vale otra cosa. Y una cosa es un mango de bisturí que de una semana a otra puede variar cinco, seis pesos por la variación del dólar. Pero si tenés un ecógrafo, que vale miles de dólares, capaz que tiene una variación de precio de 60.000 pesos de una semana a otra. Obviamente, esos equipos no se venden todos los días, pero pasa mucho en este rubro.
¿Qué otros obstáculos están enfrentando hoy en el negocio?
Los dos problemas que tenemos ahora es, uno, el desabastecimiento; y el otro gran problema es común a todos los comercios: las cargas impositivas. No hay un solo año que no nos haga correr riesgo de cerrar o de quedar ahí. Casi una vez por año pasa: es tanta la carga impositiva que no todos los meses estamos en condiciones de cubrirla. Y es una de las principales causas generadoras de desocupación porque yo si tengo meses que no llego a cubrir las cargas impositivas no puedo ni soñar en tomar un empleado más.
¿Qué planes tienen para este año?
Tengo pensado generar ofertas comprando grandes cantidades para mejorar el precio. Ahora tenemos una oferta de guantes de látex, un producto que se vende mucho y en cantidad a diferentes rubros. Vamos a lanzar una oferta de una caja de guantes por mil pesos. Y también pensamos empezar a cubrir más necesidades de estética y pedicuría, traer más cantidad de productos para que la gente pueda conseguir todo lo que busca acá y no tenga que ir a otro lado.