Aunque las presiones inflacionarias se están desacelerando, el trabajo de los bancos centrales aún no ha terminado.
Los grandes bancos centrales del mundo entrarán esta semana en una nueva fase de subas de las tasas de interés más leves, a medida que la inflación está disminuyendo desde su pico.
Pero, ante el temor de que la inflación en Estados Unidos, Europa y el Reino Unido se mantenga muy por encima del objetivo, los responsables de la política monetaria señalan que aún tienen previsto seguir subiendo las tasas para que la inflación vuelva a sus niveles previos a la pandemia.
Y, aunque las alzas de 0,5% previstas para las tres regiones esta semana están por debajo de las recientes subas de 0,75%, serán mayores que las realizadas por los bancos centrales de EE.UU., Europa y el Reino Unido antes del repunte de la inflación de este año.
La inflación de EE.UU. se desaceleró hasta el 7,3% en noviembre, muy por debajo del pico de 9,1% de junio. En el Reino Unido, se espera que los datos de este miércoles muestren una ralentización de la inflación general de hasta 10,9% en noviembre, desde el 11,1% del mes anterior, el máximo en 41 años.
Los funcionarios parecen ahora más conscientes de los riesgos que conlleva presionar demasiado a la economía. Jay Powell, el presidente de la Reserva Federal, ha dicho que, aunque la Fed hará lo necesario para que la inflación vuelva a su objetivo del 2%, el banco central no quiere frenar excesivamente la demanda y llevar a la economía estadounidense a una recesión.
Pero el peligro de que la inflación deje de caer a niveles muy superiores al 2% llevará este miércoles a la Reserva Federal a elevar su tasa de interés de referencia en medio punto porcentual.
La decisión, que subirá la tasa de los fondos federales a un rango objetivo de entre el 4,25% y el 4,5%, se produce tras cuatro alzas consecutivas de 0,75 puntos porcentuales.
Los inversores que apostaban a que la Fed podría recortar las tasas en 2023 probablemente verán frustradas esas esperanzas, a pesar de la ralentización del ritmo de las subas. Los funcionarios de la Fed han señalado que las tasas se mantendrán en “niveles elevados” durante el próximo año.
También se espera que otros bancos centrales importantes, como el Banco de Inglaterra (BoE, por sus siglas en inglés) y el Banco Central Europeo (BCE), ralenticen el ritmo de sus alzas a finales de esta semana, sin dejar de tomar en serio el control de la inflación.



