El proyecto será financiado por China, con una inversión de 8.300 millones de dólares. Las obras comenzarían a fin de año.
El Gobierno nacional firmó con las autoridades de China el contrato para la construcción de la cuarta central nuclear argentina, Atucha III. Se trata del proyecto de inversión más ambicioso del país asiático en territorio nacional, por un monto de 8.300 millones de dólares. Se prevé que las obras comiencen a fines de este año.
La central contará con un reactor de tipo Hualong, de diseño chino, que utiliza uranio enriquecido como combustible y agua liviana como refrigerante y moderador. Es una tecnología poco conocida por Argentina, a diferencia de las centrales tipo CANDU. Atucha III será la primera central nuclear en construirse en el país desde 1981.
Estará ubicada en el Complejo Nuclear Atucha, en la localidad de Lima, municipio de Zárate, y la inversión será de u$s8.300 millones para una obra que se desarrollará en un plazo estimado de ocho años y medio.
El evento donde se oficializó el contrato se realizó de manera virtual y, junto con las autoridades de ambas compañías, José Luis Antúnez y Yu Jianfeng, estuvieron presentes el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, el embajador chino en Argentina, Zou Xiaoli, su par argentino en China, Sabino Vaca Narvaja, y el subsecretario de Energía Eléctrica de la Nación, Federico Basualdo.
La firma se concreta días antes de que el presidente, Alberto Fernández, visite China por primera vez. El mandatario arribará en la madrugada del viernes, previo paso por Moscú, al gigante asiático. Participará de distintas actividades vinculadas a los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing y se reunirá con Xi Xinping, líder chino, el domingo. La central tendrá una vida útil de 60 años y cumplirá con los requisitos del Organismo Internacional de Energía Atómica. Además, incorpora los avances surgidos tras el incidente de Fukushima en materia de seguridad. Según estiman fuentes oficiales con esta megaobra se generarán 7.000 empleos directos en pico de obra y una participación de la industria local del 40%.